Grounded in gratitude: Keeping your kids calm, kind, and connected this season

By Craig Wales, November 14 2025

Father and son talk about what they're thankful for on the couch.

A medida que el año termina, la vida parece acelerar. Los calendarios escolares están llenos de conciertos y fiestas, los padres hacen malabarismos con los viajes y las tareas pendientes, y los niños captan cada emoción que se arremolina a su alrededor como copos de nieve en una tormenta. Las vacaciones pueden ser un momento mágico, pero también pueden traer estrés, sobrecarga sensorial y grandes sentimientos, tanto para niños como para adultos.

Pero en el torbellino de la temporada, hay una práctica que ayuda a toda la familia a sentir más arraigada: la gratitud. No se trata solo de decir gracias. La gratitud, cuando se entreteje en los momentos diarios, puede desarrollar resiliencia, aliviar el estrés, profundizar las relaciones e incluso despertar alegría.

Así es como puede usar la gratitud como un poderoso ancla emocional esta temporada, con ideas y herramientas para ayudar a todos a sentir un poco más tranquilos, conectados y amables.

Restablecer el ajetreo navideño: cómo la gratitud ayuda a aliviar el estrés estacional

Desde horarios repletos hasta altas expectativas, la temporada de fin de año puede desanimar a toda la familia. Los niños también lo sienten, aunque no siempre puedan decirlo. Es posible que notes más crisis, fusibles cortos o agobio emocional. Pero hay formas de salir del caos y encontrar un ritmo más tranquilo.

La gratitud es un poderoso botón de pausa. Ralentiza las cosas y cambia el enfoque de la presión a la presencia. Pruebe una "caminata de gratitud" luego de la escuela donde cada persona nombra una cosa que le gustó de su día. O elija solo una tradición significativa para priorizar, en lugar de tratar de hacerlo todo. Deja ir el resto.

Para los niños más pequeños, las rutinas siguen siendo importantes, pero también lo es la flexibilidad. Cuando las transiciones se vuelvan complicadas, intente decir: "Fue un día ajetreado. Busquemos un lugar acogedor y respiremos profundamente juntos". Para los niños mayores, valide su estrés: "¿Qué parte de esta semana se siente más difícil?" y hable sobre un plan de juego. La gratitud no borra el estrés, pero ayuda a su familia a superarlo juntos.

Para obtener más ideas para niños según su edad, consulte este artículo para miembros sobre cómo manejar las fiestas. Recuerde, la membresía es gratis y solo toma unos minutos registrar. 

Aumentar la gratitud en sus hijos

La gratitud no es una habilidad que los niños aprendan de la noche a la mañana. Crece gradualmente, a través de la experiencia y el modelado. Y la forma en que lo nutrimos depende mucho de su edad y desarrollo emocional.

  • Niños:

    • Narre gratitud en voz alta: "Esta sopa está tibia y deliciosa. ¡Tenemos suerte de tenerlo!"

    • Juega a "una cosa que te hizo sonreír hoy" a la hora de acostarte.

  • Estudiantes de educación temprana:

    • Pruebe un check-in de capullo de espina de rosa: la mejor parte, el momento complicado y algo que esperar.

    • Haz preguntas como: "¿Quién te ayudó hoy?" o "¿Qué te hizo reír?"

  • Preadolescentes:

    • Fomenta un diario de gratitud o un diario de garabatos.

    • Sugiera actos de bondad como ayudar a un vecino, escribir notas de agradecimiento o donar un juguete.

A cualquier edad, la mejor manera de mostrar gratitud es vivirla tú mismo:

  • Dé las gracias a su niño/a por sus contribuciones diarias: "Gracias por poner la mesa. Eso realmente me ayudó".

  • Muestra aprecio por las personas que te rodean: el profesor, el repartidor, tu pareja.

¿Quieres aún más ideas basadas en la edad para fomentar el agradecimiento en tu familia? Consulte nuestro artículo para miembros que tiene ideas para inspirar gratitud en sus hijos a medida que crecen.

Por qué la gratitud es un superpoder para el bienestar emocional

La gratitud no se trata solo de buenos modales. Se trata de conectar nuestros cerebros para notar lo bueno, incluso en momentos difíciles. Y para los niños, ese simple cambio puede ser transformador.

Decir gracias puede despertar alegría. Cuando los niños experimentan un momento real de agradecimiento, ya sea que lo estén dando o recibiendo, reciben un pequeño impulso emocional. Libera sustancias químicas para sentir bien en el cerebro que los ayudan a relajar, sentir más seguros y Connect más fácilmente con los demás.

También desarrolla la resiliencia emocional. La gratitud ayuda a los niños a Zoom de sus propias luchas y reconocer el panorama general. Aprenden que si bien suceden cosas difíciles, aún pueden encontrar algo bueno: una mano amiga, un momento de risa o una lección aprendida. Esta perspectiva ayuda a los niños a manejar la decepción, reducir la ansiedad y navegar el estrés social con más confianza.

Con el tiempo, la gratitud también aumenta la empatía. Cuando los niños aprecian lo que tienen y quién los ayuda, naturalmente quieren retribuir. Eso podría ver como donar un juguete, incluido un colega de clase, u ofrecer una palabra amable. Estas pequeñas acciones se extienden hacia afuera, ayudando a construir comunidades más amables.

Comprender el estrés de adentro hacia afuera

No todo el estrés se ve igual. A veces, es un aula ruidosa o un horario de vacaciones repleto. Otras veces, es un pensamiento tranquilo dentro de la cabeza de tu niño/a: "¿Qué pasa si me equivoco?" o "¿Qué pasa si a nadie le gusta mi regalo?" Mostrar a los niños la diferencia entre los desencadenantes del estrés y los sentimientos los ayuda a dar sentido a sus emociones y le brinda herramientas para apoyarlos.

Cuando el estrés se desencadena por algo externo, como una situación social difícil o un gran evento, intente hacer una pausa para Connect. Si su hijo está nervioso por ir a una gran reunión familiar, reconózcalo: "Se siente un poco inseguro de volver a ver a todos. Eso tiene sentido". Ofrezca perspectiva: "Podemos permanecer juntos hasta que se sienta más cómodo, y si necesita un descanso tranquilo, hágamelo saber". Y si es necesario, haga espacio para descansar. 

Cuando el estrés proviene de sentimientos internos, ayude a su niño a nombrarlo. "Parece que te sientes frustrado. ¿Quieres hablar o tomar un descanso juntos?" El simple hecho de nombrar el sentimiento crea espacio para la calma. No tienes que arreglarlo, solo escucha y está allí.

Y recuerda, tus sentimientos también importan. Nombra tus propios sentimientos y modela un afrontamiento saludable: "Me siento un poco estresado, así que voy a salir por un minuto y respirar". Eso no es solo cuidado personal, es dar un buen ejemplo.

Descubra más formas de ayudar a su niño/a a a manejar el estrés durante la temporada navideña en este artículo para miembros.

La gratitud es el regalo que sigue dando

Cuando las familias dejan espacio para la gratitud, dejan espacio para una mayor calma, amabilidad y conexión, incluso en las temporadas más ocupadas. No necesitas una rutina perfecta o tradiciones dignas de Pinterest. Todo lo que se necesita son algunas pausas intencionales cada día para notar lo que es bueno, agradecer a las personas que ayudan y reflexionar sobre lo que más importa.

Ese simple cambio puede convertir las mañanas caóticas en momentos significativos. Puede convertir el estrés en risas compartidas. Y puede ayudar a su niño a desarrollar un corazón que note los puntos brillantes, incluso cuando el cielo está nublado. Obtenga más información sobre los muchos beneficios de la gratitud en este artículo para miembros. 

Y si alguna vez necesita apoyo en el camino,BrightLife Kids Coachesaquí para ayudarlo a usted y a su familia a desarrollar ritmos tranquilos, flexibles y llenos de alegría que duren mucho después de que las vacaciones se desvanezcan.